Frank Donovan: Historia de la Brujería / Ella Fitzgerald: Let's do it

<<En Europa, los gatos no llegaron a domesticarse de manera generalizada hasta el siglo XVII. Cualquier mujer que acariciara un gato o le hablara, o tuviera un cuervo domesticado, era mirada por sus vecinos con tal extrañeza que sólo esto podía ya suscitar la sospecha de que fuera bruja. [...] Con motivo de la coronación de Isabel I de Inglaterra, se sacó en procesión una efigie de cestería representando al Papa llena de gatos, y luego la quemaron solemnemente sobre una pira. Los protestantes que perpetraron esta atrocidad pretendían que los alaridos de los gatos eran el lenguaje de los demonios dentro del cuerpo del Santo Padre>>.

<<Si señaláramos en un mapa la manía de cazar brujas con un punto por cada ejecución comprobada, la mayor concentración se encontraría en la zona donde se unen Francia, Alemania y Suiza. ... Habría una espesa concentración de puntos en Suiza y desde el Rhin a Ámsterdam, así como en el sur de Francia, y salpicarían Inglaterra, Escocia y los países escandinavos. Debe observarse que, al menos durante el último siglo de persecución, muchas zonas en las que la concentración es más espesa eran también centros de protestantismo. En los países totalmente católicos (Italia, España e Irlanda) habría muy pocos puntos; en España, prácticamente ninguno>>.

<<El afamado jurista francés Jean Bodin escribe: 'Aunque la bruja no haya matado ni hecho mal a hombre alguno, ni a bestia ni a fruto, y aun si ha curado siempre a los endemoniados o ha disipado las tempestades, no es sino renunciando a Dios y por haber pactado con Satanás, por lo que merece ser quemada viva... Aun cuando no exista más que la servidumbre al diablo, habiendo negado a Dios merece la muerte más cruel que quepa imaginar'>>.

 
<<La Demonomanía fue escrita para orientar a los jueces en su enfrentamiento con la brujería y se basa en la amplia experiencia de Bodin como juez en los juicios de brujas. ... 'No debemos atenernos a las reglas ordinarias de enjuiciamiento... pues la prueba de semejante mal es tan oscura y difícil que ni una sola bruja entre un millón podría ser acusada o castigada si siguiéramos un procedimiento legal regular'. Luego interpreta la ley apoyando procedimientos para procesar y condenar a las brujas diametralmente opuestos a los aceptados en cualquier otro juicio>>.

Frank Donovan, Historia de la brujería, Madrid, Alianza Editorial, 1985 (1978)

Ella Fitzgerald: Let's do it