ERRAR AL AMANECER -- Martín Zarzar: Moliendo café
Errar al amanecer
<<¡Ese olor! ¡Qué bueno! Tengo que hallar de dónde viene. Me llama. No puedo resistirme. Corro, corro entre las matas, salto sobre las piedras, atravieso los charcos. ¡No escapará! Ahí está, ya lo tengo. ¡Quieto ahí, conejo, quieto ahí! Ladro, ladro, ladro. El amo estará contento, el amo es bueno, el amo viene. Jadeo, jadeo y ladro, jadeo y ladro. Ya está cerca el amo. ¡Eres nuestro, conejo! Ahí está el conejo, amo, ahí delante, frente a mi hocico, frente a mi nariz. ¡Ay, ay, ay! ¿Por qué, por qué este dolor, este horrible dolor?>>
¡Mierda, puñetera mierda! ¡Le he dado al perro! Joder, qué palo. Pobre animal. A ver si es grave. ¡Ay, que lo he matado, que he matado a mi perro! Maldita sea mi puntería, maldita sea esta escopeta, maldita la ocurrencia de salir a cazar hoy, en este amanecer desastroso. Y este olor, este olor a pólvora, a barro putrefacto, a humedad, a sangre, a vísceras y, ahora, también a mierda y meada de perro, porque este pobre animal se ha cagado y meado en su agonía, mientras me miraba de esa manera tan triste.
Hoy he hecho el ridículo más brutal. Matar a mi propio perro, y precisamente en una cacería con toda esta gente. ¡Maldita sea mi suerte! En fin. Ahora el problema es que tengo la nariz llena de todos esos olores horribles. Se me han metido bien adentro. Tengo que tranquilizarme, tengo que relajarme. A ver, a qué huele el viento. Esta mañana limpia de invierno ha de oler a aire frío, a humo de leña, a los pinos de ese bosque, a las yerbas silvestres. ¡Cágonla, no puedo oler nada de eso! Sólo siento los efluvios horribles de la muerte atroz del pobre animal.
Ya me llaman. Que sea lo que haya de ser. He perdido por completo el olfato. Peor aún, tengo la nariz y el cerebro llenos de olores repugnantes y no percibo nada más. ¡Ya me llaman! Espero que el bodeguero imbécil este no me vuelva a presentar ante los periodistas y el público como la mejor nariz de Europa, como el único catador capaz de identificar sólo con el olfato la añada de cualquiera de los mil mejores vinos del mundo.
2012
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