Isabel Allende, Más allá del invierno

   "Y entonces, tropezando con las sílabas y temblando, la joven les dijo que tenía un muerto en la cajuela del automóvil. Debió repetirlo dos veces para que Lucía lo entendiera. A Richard le costó más". 

   "Se abandonó por completo a la autoridad formidable de la droga y al hacerlo perdió el miedo. La madre jaguar volvió con sus cachorros y ella se atrevió a pasarle la mano por el lomo, tenía los pelos duros y olía a pantano. Esa enorme gata amarilla la acompañó a ratos, entrando y saliendo de otras visiones, observándola con sus ojos de ámbar, mostrándole el camino cuando se perdía en laberintos abstractos, protegiéndola si la acechaban seres maléficos". 

Isabel Allende, Más allá del invierno, Barcelona, Plaza y Janés, 2017, 352 p. 

Una novela isabelallendiana escrita con el estilo y eficacia habitual de la autora. Personajes con un pasado dramático que hacen el bien y combaten la injusticia social (culpable de todo el mal, incluyendo los más abominables crímenes) con su amor al prójimo. Historias que terminan bien pese a que la falta de un hervor en sus protagonistas hiciera temer lo contrario. Tras leer el primer cuarto del libro, en que no sucede nada excepto la presentación de los personajes y sus complejos antecedentes, por fin se anima el relato porque aparece un cadáver en el maletero del coche. 



Comentarios

  1. Respuestas
    1. Esa hubiera sido una idea genial y el interés de la novela hubiera crecido notablemente.

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