Shakespeare, Mucho ruido y pocas nueces

 "Yo quisiera que mi caballo tuviera la rapidez de vuestra lengua".


"-Dios me dé un buen compañero para bailar.

-Amén.

-Y que Dios me lo quite de delante cuando se termine el baile".


"Todavía no he encontrado a un filósofo capaz de aguantar con paciencia un dolor de muelas". 


William Shakespeare, Mucho ruido y pocas nueces, Barcelona, Ediciones B, 1995. 

Una obra encantadora, con gracia (y salero).




Comentarios

  1. Lo del filósofo y la odontalgia lo subscrito pese a no ser filósofo. Pero a menos que seas un sofista no afirmaras que el dolor no duele. Ni aún seas estoico.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares